Poli Raro de Guillermo Lizarán
- El Deivid
- 8 abr
- 2 Min. de lectura

Edición original: Grafito Editorial
Formato: Rústica con solapas
120 páginas
Precio: 18€
¡Qué bien lo pasábamos los niños de los años 80 con los libros de “Elige tu propia aventura”! Historias en las que tú eras el protagonista, en las que tenías que tomar decisiones que te llevaban hacia unos finales u otros. Una forma de acercar el mundo de los videojuegos o los juegos de rol a la literatura que transformaba la lectura en algo interactivo. Si esta idea la llevas al cómic y además lo haces bien, consigues una obra divertida y entretenida como ha hecho Guillermo con su Poli Raro.
Tengo que reconocer que tenía mis dudas una vez que tuve entre mis manos el cómic por primera vez. Trasladar toda la magia de aquellos fantásticos libros de mi infancia a un tebeo no iba a ser tarea fácil, pero según avancé por sus páginas las dudas se disiparon totalmente. La toma de decisiones es ágil y divertida. Cuentas con un montón de finales distintos y las tramas varían en función de las decisiones tomadas. En este aspecto Poli Raro es perfecto. Su mecanismo interno funciona a la perfección. Tiene una coherencia totalmente lógica en función de qué camino decidas tomar. ¿Pero, y a nivel cómic? Una maravilla también.
Poli Raro es una historia (o varias historias, mejor dicho) que nos lleva por una investigación policíaca con tintes de ciencia ficción. Las herramientas de la novela policíaca están perfectamente usadas. En lugar de clichés, tenemos homenajes o sátiras, y si ya es complicado combinar diversas tramas según las decisiones que se tomen, el rizo con doble tirabuzón del autor se consigue gracias a un guion muy bien estructurado. De la mano de McIntosh, un androide agente de policía, tendrás que resolver el asesinato de un campeón de boxeo robot.
Guillermo aprovecha la trama principal para armar una sociedad bien construida con distintas especies y clases. Aquí también hay sitio para la crítica social. Mordaz y afilada como el resto del sentido del humor que plaga prácticamente cada viñeta. Humor inteligente y bien medido, absurdo en algunos casos, eficaz y espontáneo. Según avanzan las páginas vamos a conocer poco a poco los entresijos sociales de Ciudad Colmena, un escenario perfectamente retratado gracias al ingenio gráfico de Guillermo.
Sí, también el apartado gráfico sobresale. Los diseños de personajes, su expresividad y los escenarios son brillantes. La narrativa es fluida y ágil. El uso del color espectacular. No se le puede poner una pega.
Un cómic que funciona muy bien en todos los sentidos. Ambicioso en su planteamiento técnico, pero sencillo y entretenido al mismo tiempo. Su mecanismo interno funciona a la perfección. A mí me ha obligado a leerlo varias veces tomando diversos caminos para entrarme bien de cómo terminan todas las opciones. Muy recomendado para jóvenes y no tan jóvenes. Si en algún momento disfrutaste de este tipo de formatos “Elige tu propia aventura” vas a gozarlo como cuando eras niño.
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